Hola, ¿cómo les va?
Espero que estén super bien. Hoy les preparé una actividad junto a una compañía muy especial… ¡SI! Preparamos un cuento canción llamado “Un día de lluvia” para que puedan observar y escuchar los gustos de Juan, el protagonista de este cuento. A su vez podremos construir un pequeño instrumento con lo que tenemos en casa, más precisamente en el cajón de la cocina, para hacer ritmo.
Cuento: Un día de lluvia
Hoy Juan se despertó muy feliz. No sólo porque sabía que tenía que ir a la escuela, sino también porque cuando abrió sus ojos, lo primero que vio fueron unas nubes un poco grises que se movían en el cielo… y de pronto, recordó que le habían dicho que cuando las nubes estaban grises, era porque seguramente, pronto iba a llover. ¡Qué contento se puso! Porque… ¿saben qué? ¡A Juan le encanta la lluvia!
Se despertó de un salto, tomó el desayuno, y luego de cambiarse la ropa, bajó las escaleras para poder sentir las primeras gotitas de lluvia en su cara.
Y de repente… las nubes se ponían cada vez más oscuras, hasta que unas pequeñas gotitas empezaron a caer desde el cielo. ¡Qué contento estaba Juan!
Tanta alegría tenía, que empezó a correr de la felicidad… hasta que… ¡no saben lo que se encontró! ¡Un charco de barro y agua! ¡No saben qué contento se puso! Tan contento, ¡que empezó a saltar en el charco como si fuera un sapo!
Tanto saltó y saltó… ¡que no se imaginan cómo quedó! ¡Enchastrado de barro! Tenía barro en la cara, en las manos, en las piernas y en los pies… ¡parecía una torta bañada en chocolate!
Y colorín colorado, este cuento embarrado, se ha terminado.
Un abrazo. La seño Gaby.
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